viernes, 22 de julio de 2016

ESTEBAN FELIPE

09-04-2016  


Barro, barro y mas barro es el resumen de esta cueva.
Vamos el viernes a dormir al refugio que tiene peña guara que esta al lado de la sima. La pista para llegar es eterna. Por momentos pensamos que nos hemos perdido pero no, al final llegamos. Unas longanizas y chorizos a la brasa acompañados de unos culines de sidra nos amenizan la noche.



A eso de las diez llegamos a la entrada de la sima. Corre un airecillo que, mientras instalan la entrada de la cueva, nos deja helados hasta que nos dan los rayos de sol que aparecen entre las nubes. Instalan dos vías para ir mas rápido. La cueva tiene todo tipo de dificultades. Rapeles fraccionados, gateras, rampas, una estrecha diaclasa, etc... El barro hace acto de presencia nada mas entrar en la cueva y va aumentando según penetramos en ella. Las gateras tienen dos dedos de barro y agua. Pasamos con las puntas de los pies intentando que no toquen las rodillas con el agua pero por mucho que lo intentamos pronto estamos mojados y cubiertos de barro. Comemos en la sala de la campana y es imposible no masticar tierra. No tengo ni un centímetro sin barro para rascarme el ojo.



El paso mas famoso de la cueva es la diaclasa de varios metros llamada el paso del egipcio denominada así porque hay que pasar de lado poniendo una pose que recuerda a las posturas que salen en los papiros  de los egipcios. Una vez dentro no se puede girar la cabeza de lo estrecho que es. Yo entro, no se porque, con la cabeza mirando hacia atrás y, a lo que me doy cuenta, ya no puedo girar la cabeza. Otro problema es que hay que ir con el arnés y los aparatos porque la diaclasa acaba en un pozo. Salvamos el pozo por medio de un pasamanos y hay dos vías instaladas en fijo para subir a las galerías superiores.




Una vez que estoy arriba suben varios mas y luego pasa mucho rato sin que aparezca nadie. Parece que uno a tenido algún problema en un fraccionamiento. Se nos ha hecho muy tarde y nos bajamos sin que suban todos. El paso del egipcio me resulta mas difícil a la vuelta. Se me atasca varias veces el arnés de pecho y tengo que retroceder para liberarlo. La vuelta es mas rápido. Uno se pone malo, posiblemente un corte de digestión, y lo pasa bastante mal para salir. A lo que salimos es casi de noche y vamos de barro desde la punta de los pies a la cabeza.



Al día siguiente nos vamos ha hacer el barranco de los estrechos de carracua. Es un barranco muy bonito de iniciación. Baja bastante agua y esta turbia impidiendo ver la recepción de las pozas. El agua esta muy fría. En poco mas de una hora lo hemos terminado.


jueves, 21 de julio de 2016

TRAVESIA DEL ALBA

02-07-2016  


Grupo 1: Miguel Angel, Isabel, Eli, Jose, Hector
Grupo 2: Mariano, Marta, Monica, Quique, Javi
Grupo 3: Ainhoa, Nacho, Nueno, Tello, Fleta

Después de todos nuestros esfuerzos del año por fin estamos preparados para una gran travesía, la del Alba, posiblemente la travesía mas representativa de Aragón. La travesía tiene un desnivel de 546 metros y un recorrido de 1182 metros.
Las coordenadas son:
Bujerín de Alba: X: 303.900 Y: 4726.570 Z: 2.290 (msnm)
Cueva de Alba: X: 302.920 Y: 4727.150 Z: 1.760 (msnm)

Como la travesía va a ser larga dormimos en la escuela de alta montaña de Benasque para no tener que madrugar tanto. Son fiestas en Benasque pero nos entra el sentido común y decidimos echarnos a la cama a una hora prudencial. A las ocho de la mañana ya estamos todos desayunados y preparados para iniciar la actividad. Aparcamos los coches en el aparcamiento al lado de los baños de Benasque. No empezamos a preparar las mochilas con el equipo cuando Marta se da cuenta que se ha dejado el bote estanco con todas sus cosas en la escuela. Se van rápidamente a por ello. Antes de que vuelvan, el primer grupo ya se ha equipado y parten hacia el bujerin del Alba que es donde esta la entrada a la travesía. Al cabo de bastante rato, que ya nos empezamos a preguntar si no se habrán perdido, aparecen Nueno y Marta con el coche. Se preparan y salimos los pocos que quedamos. Del aparcamiento bajamos unos cientos de  metros hasta un desvío a  la derecha con señales de GR. Seguimos por la senda hasta otro sendero a la derecha que sube fuertemente. Vamos siguiendo las señales hasta llegar llegar al ibon del Alba. Desde allí subimos por la izquierda unos 40 metros hasta localizar el agujero del Bujerin.



En la subida nos encontramos con ortigas. Marta coge una mata y viene hacia mi con intenciones aviesas pero no se ha dado cuenta que tengo mas a mis pies. Cojo una mata y empieza la guerra. Al día siguiente aun le pican las manos y los gemelos. No tenia nada que hacer.

ALGUNA HA PERDIDO LA BATALLA

Llegamos al Bujerin en hora y media mas o menos. Los primeros entran sobre las once y media de la mañana y los últimos sobre la una. El primer grupo ya esta listo para entrar. Nos dejamos media hora de ventaja entre los grupos para no tener que estar esperando en los rapeles. Como entramos los últimos tenemos un buen rato de espera. Hace aire pero al sol no se esta del todo mal. Estando esperando en la entrada aparecen tres miembros de la federación que vienen a ver el estado de la vía clásica para una posterior reequipación. Después de hora y media de espera entramos al agujero. Nos arrastramos un poco y accedemos al primer pasamanos que nos sitúa en el primer rapel de 32 metros. Ya empieza lo bueno. Nos encontramos un par de escuálidos tritones que se mueven muy lentamente.

 DETRÁS EL BUJERIN


Antes de llegar a la porqueriza, un estrecho meandro lleno de barro, dejamos pasar al equipo de la federación. Haciendo malabares en oposición consigo no mojarme los pies. Hemos pillado al segundo grupo en el rapel de 56 metros, que ha tenido un problema en el rapel. Esperamos en la porqueriza, poniéndonos cómodos, por decir algo, entre las estrechas paredes. Estamos allí una hora en la que nos quedamos helados. Corre un airecillo que hace que nos arrebujemos en nuestros monos. La temperatura media de la cueva es de 4 grados y la humedad es bastante alta. Yo llevo un mono de algodón y lo acabare pagando. La mayoría de los rapeles tienen instalada cuerda fija lo que nos evita estar montando y desmontando cuerda, ahorrando bastante tiempo.



Conforme pasan los rapeles vamos oyendo el río que discurre en algún punto por debajo de nosotros. Asusta un poco el estruendo que llega a nuestros oídos. Por fin legamos a la altura del río que discurre salvajemente por entre las rocas creando varias cascadas que nos dejan con la boca abierta. Lo seguimos durante bastante rato hasta que, en algún momento, nos hemos metido en una galería y, de repente, se deja de oír el río. ¡Que descanso! Mientras lo teníamos no nos dábamos cuenta del ruido pero al hacerse el silencio, este nos golpea fuertemente. Llegamos a la sala Maldita. Una sala de grandes dimensiones en la cual el frontal no alcanza a iluminar las paredes. Aquí hacemos un descanso a comer y reparar las fuerzas con un buen trago de la bota de vino que ha traído Tello.



Desde la sala maldita tenemos dos vías para continuar, la clásica y la llopis. Las dos se juntan en la sala Leonor. La mas bonita es la sala Llopis que es por la que nos meteremos. En la sala Maldita hay un libro donde apuntaremos cuantos somos y que vía vamos a hacer por si ocurriera algo facilitar la labor al grupo de espeleorescate. Al lado del libro hay un cartel que nos indica hacia donde va cada vía. La travesía esta muy bien marcada con reflectantes y flechas. Ademas Miguel Ángel lleva reflectantes que nos va dejando para facilitarnos aun mas el camino. Yo los voy recogiendo. Por la vía Llopis empezamos a ver formaciones y algún pasillo de gours muy bonitos. Yo he ido esquivando pisar el agua y en un descuido tonto piso un charco y acabo con el pie empapado.




Hemos vuelto a pillar al segundo grupo y otra vez a esperar una hora. Yo cada vez tengo mas frío y estas esperas me matan. El mono cada vez esta mas mojado y mas me cuesta entrar en calor. Nos encontramos con algún anclaje en mal estado y las cuerdas, que llevan allí sabe dios cuanto tiempo, no nos dan mucha confianza. Las cuerdas corren fatal por el stop y en los rapeles largos se cansa mucho la mano de apretar la palanca. Alguna cuerda tiene alguna flor y en un par ya les han hecho un nudo para evitar la parte rota, lo malo es que se acorta la cuerda y en algunos casos no queda ni para hacer la llave de bloqueo. Hay un par de rapeles guiados para evitar el agua. En uno de ellos la cuerda guía esta desecha. Tiene toda el alma al aire y algunas hebras cortadas. Si se partiera haríamos un péndulo brutal. Para matarnos. Los rapeles se suceden sin descanso y pierdo totalmente la cuenta de cuantos llevamos. Solo se que ya tengo ganas de que se acaben.



Poco antes de la sala Leonor volvemos a coger al segundo grupo y esta vez también al primero. Otra vez a esperar. Nos tomamos unos sorbos de sopa caliente que nos sabe a ambrosía y nos calienta el estomago. Le damos al primer grupo 20 minutos porque de la sala Leonor se sale con un rapel fraccionado y aquí estamos al resguardo del agua. Sale el segundo grupo y a los diez minutos salimos nosotros. Yo ya estoy muy helado. Me entra la temblequera y no hay manera de entrar en calor. Estoy tieso. En un momento llegamos a la sala Leonor. Una cascada de mas de treinta metros se precipita por encima de nosotros pulverizándose el agua sobre nuestras cabezas. El sitio es espectacular.




A pesar de que en esta sala ha subido la temperatura unos pocos grados, yo cada vez tengo mas frío. Me pongo un forro polar pero no lo noto mucho. Al poco rato esta empapado y tenemos que esperar un buen rato hasta que bajan los otros dos grupos el rapel fraccionado. Aquí la cueva se vuelve mas horizontal lo que no quita que haya bastantes rapeles pequeños. Gracias a los reflectantes de Miguel no perdemos tiempo en encontrar el camino en el caos de bloques que nos vamos encontrando. Poco a poco vamos atravesando por las diferentes zonas de la cueva, el paso del pilet, la pared del sos, galeria de les angunies, el sifón del viento, etc... El cansancio va haciendo mella y cada vez echamos menos fotos y mas nos cuesta avanzar.



Llegamos a la parte mas bonita de la cueva, la galería del mármol. Las paredes están cinceladas con preciosas vetas de mármol de diferentes colores. Vetas blancas, negras y grises se abren frente a nosotros. Un espectáculo para los ojos que no nos cansamos de admirar. Después de pasar un bloque, unas ondas de mármol nos reciben con toda su belleza. Para mi lo mas bonito de la cueva.
Ya nos va quedando menos. La siguiente dificultad el destripamonos una estrecha diaclasa por la que hay que progresar a cierta altura moviéndonos en contraposición. No es difícil pero una caída podría traer consecuencias por lo que a pesar del cansancio hay que poner los cinco sentidos.
Llegamos al paso del lago que esta equipado con un pasamanos de sirga para evitar mojarnos. En un punto intermedio la sirga esta deshilachada y conforme vamos pasando nos viene a la cabeza si no seré yo al que se le rompa del todo. Proseguimos despacio y ya solo nos queda el final y...¡por fin estamos fuera! Son las dos de la mañana. Mas de 15 horas de actividad con la aproximación. Estamos cansados pero muy felices de haberlo conseguido. El primer grupo hace rato que ha salido y están ya cambiados en los coches y los otros dos nos hemos juntado en la salida y nos damos unos abrazos y la foto de rigor. Ya solo nos queda regresar al coche y ponernos secos. En veinte minutos llegamos. Mas abrazos, nos ponemos secos y nos vamos a la escuela de alta montaña a cenar que tenemos un hambre canino.



domingo, 5 de junio de 2016

SIMA DE SAN PEDRO

04-06-2016


Comienza una nueva aventura del grupo pipistrellus. Hoy toca ir a pasar el día a la sima de San Pedro, en la localidad de Oliete. Miramos el cielo con preocupación pues han dado lluvias todo el día. Lo cubren algunas nubes pero de momento parece que vamos a tener suerte y nos va a respetar la lluvia.
La sima de San Pedro es única en Europa. Tiene una boca de unos 80 metros de diámetro y 90 de profundidad. El fondo de la sima esta ocupado por un lago de 22 metros de profundidad. El agua esta muy sucia por estar estancada y por los excrementos de las especies que habitan en la sima. Sale un ligero tufillo que inunda nuestras fosas nasales. En la sima habitan gran cantidad de especies, unas 25  entre mamíferos, aves, anfibios y reptiles. Lo mas peculiar de todo son las aves. Al amanecer salen de la sima por especies en un orden determinado y al anochecer vuelven a la sima en orden inverso. Dicen que es todo un espectáculo.

       foto: Migue Ángel


En una orilla de la sima hay una plataforma metálica que es donde montamos las dos cuerdas por las que vamos a descender. Desde aquí impresiona bastaste, sobre todo cuando hay que dar el paso al otro lado de la barandilla. Bajar 95 metros de rapel se hace largo. Hay que bajar despacio para que no se caliente excesivamente la cuerda. La bajada se acaba justo al lado del lago de aguas negras. Menos mal porque no apetece meterse en esas oscuras y sucias aguas. Levantar la vista hacia arriba hace que me quede muy impresionado por las dimensiones de la sima. La quietud del lago y el sonido de los pájaros me hace entrar en un estado de paz y relajación mientras espero que baje mas gente.  Poco a poco van llegando. Estando sentados en una ladera, saca Mariano el bote estanco y lo deja apoyado en el suelo. Clank, clank, clank, chof. El bote se va rodando hasta el lago. Afortunadamente se ha quedado a un par de metros de la orilla y no se ha ido hacia el centro. ¡Cualquiera se mete a cogerlo! Agarra Manolo una rama de higuera y con paciencia y provocando una corriente con ella, consigue atraerlo y cogerlo.




Después de que llegan todos toca lo mas duro; subir. Empiezo yo con Hector. La cuerda se estira tanto que hay que recoger varios metros antes de que se tense lo suficiente para poder subir. La cuerda chiclea una barbaridad. Y hay veces que tengo la sensación de no avanzar. Subo el puño y al hacer fuerza en la pedaleta, en vez de subir yo, baja la cuerda. Es una sensación muy rara. Desde fuera me han dicho de daba la impresión de que estaba haciendo los gestos de subir pero sin moverme del sitio, como en los sueños que corres y no avanzas. Tanto chicleo arriba y abajo acaban mareandome. Poco a poco se van reduciendo las distancias a la plataforma. Los metros se hacen largos y ponemos a prueba nuestros pulmones y piernas. ¡Al fin arriba! Por lo menos estamos teniendo suerte con el tiempo. No hace mucha calor, lo que provocaría que la subida fuera un infierno, y solo llueve unos pocos minutos.



Poco a poco va subiendo la gente. Van viniendo visitantes a la sima. Primero vienen varias familias con un montón de críos que aplauden cuando ven aparecer a Rafa por la barandilla. Luego vienen un grupo de abuelos. Las abuelas vitorean a las chicas que están subiendo.
- ¡Animo!¡ Las chicas al poder!- gritan mientras les dan ánimos
Las recibimos arriba con un fuerte aplauso.

       Foto: Miguel Ángel



 Han llegado otros dos abuelos que son peores que los críos. Habiendo gente abajo se ponen a lanzar piedras al lago.
Ya solo que da Miguel Ángel por subir.Estamos asomados a la barandilla cuando de repente le oímos gritar a Eva:
- !Venga moñas¡
Nos quedamos todos callados mirándonos asombrados porque no nos lo esperábamos nadie
-¡Maricón el último!- grita a continuación Isabel sin darnos tiempo a recuperarnos de la sorpresa.
Aunque luego lo nieguen les oímos todos jajaja
Ha sacado Fernando unas cervezas y cuando a Miguel Ángel le quedan pocos metros, le preguntan si quiere. Se la lanzan a ver si le atinan en la boca. Coge una Isa y en vez de lanzasela poco a poco se la vuelca entera. Le pone el mono en perdición.
Ya por fin todos estamos arriba. Estamos en los coches y aparece Miguel Ángel con el mono totalmente abierto y con unos calzoncillos fluorescentes. ¡Menudas pintas! Los dos abuelos están un poco retirados y les oímos decir entre ellos pero un poco fuerte para que les oyéramos:
- ¡¡Oye, pero aquí cuando se folla!!


 Después de la sima nos vamos a Oliete a comer. El del bar nos deja llevar nuestra comida a la terraza si le cogemos la consumición. Se esta de vicio. Tienen un horno exterior que me parece que la próxima vez que vengamos habrá que reservar para probarlo



                                 



miércoles, 1 de junio de 2016

VALSALOBRE, SIMAS PERDIDOS II Y Z3. SALIDA CLUB PIRINEOS

28-05-2016   


Otra salida del grupo pipistrellus del club de montaña Pirineos. Integramos el grupo 15 personas del club. Esta vez nos toca Valsalobre en Cuenca. Nos vamos el viernes por la noche a dormir al refugio de la torreta. Para llegar al refugio hay que ir al pueblo de Peñalen y desde allí, en el kilómetro 10,9 dirección Villanueva de Alcoron, tomar un camino la izquierda que nos llevara hasta el refugio.
En el coche que iba yo a saltado la alarma de que falta anticongelante. Paramos en una gasolinera a comprar.
- Buenas. Queremos anticongelante.
- 9 euros cuesta.- responde el de la gasolinera
- Igual mejor le echamos agua destilada que es mas barata.
- Pues son 4 euros.
- Creo que con una botella de agua normal sera suficiente.
Compra Quique la botella de litro y medio por un euro. Mas tarde nos reímos con ganas al darnos cuenta que llevamos cerca de 20 litros de agua en el coche pues no hay donde vamos. ¡ Desastre! Vaya cabeza tenemos. Nos sentamos en una terraza a tomar una cerveza y con la consumición nos sacan unas gambas, ensaladilla y unas patatas. Estando allí nos pasan dos coches del grupo con los que vamos pero como acabamos de pedir nos quedamos mas rato. No hay nadie de nosotros que sepa el camino y recorremos la carretera de arriba a abajo varias veces hasta que nos decidimos a llamar para que nos den mejores indicaciones.



El refugio de la Torreta es libre. Se llama así por la torre de vigilancia que se alza a su lado. Hay un fuego, dos mesas y varias camas que no son suficientes para todos. Dos duermen al raso, otro en el coche y los que nos quedamos sin camas en el suelo. Se ha ido Miguel Ángel a mirar las cuevas y resulta que hay cinco grupos de espeleo en la zona y tres de ellos de cursillo. Están instalándolas ya para, el sábado, tener todo listo. Nos han fastidiado las simas que queríamos hacer. Por lo menos hemos cogido el refugio antes que ellos. Después de una copiosa cena (hemos traído tanta que podríamos comer todos los días)  nos salimos fuera a ver el precioso cielo estrellado que se alza sobre nosotros. Me subo a la torreta y me quedo extasiado ante las vistas de las estrellas que refulgen en la bóveda celeste. Después de eso caen unas sidras al cuerpo y a dormir. Cuando se están tantos en un sitio durmiendo los ronquidos son inevitables.


 POZO DE 35 METROS
 POZO DE 35 METROS

Mal dormidos algunos, nos levantamos a las ocho de la mañana dispuestos a comernos las simas. Lo malo es que las planeadas están cogidas. Decidimos hacer las simas Z3 y perdidos II. Nos separamos en dos grupos y nos vamos cada uno a una. El grupo en el que me ha tocado va a hacer la sima de perdidos II. Accedemos a la cavidad con una instalación a un árbol que da paso a un pozo de 11 metros. De allí fraccionamos hasta llegar a la cota de -17. Aquí la sima se divide en dos, por debajo una pequeña gatera nos lleva al pozo de 35 metros que se fracciona a unos cinco metros mas abajo. Bajamos por allí hasta el fondo que es bastante estrecho. Hay un pequeño charco que, visto desde arriba, parece que vaya a ocupar todo pero cuando llegas abajo hay sitio sin problemas para estar sin mojarnos. Como el sitio es estrecho, no podemos refugiarnos de las pequeñas piedras que caen ocasionalmente. Cuando instala Miguel Ángel la vía que va por encima de la gatera, empezamos a subir mientras bajan los que faltan. No hay formaciones en la cavidad pero a mi me ha encantado el tubo final.
Para mas informacion: http://clubviana.mejorforo.net/t51-cuevas-y-simas-de-cuenca-en-pdf



Después de salir de esta cavidad nos dirigimos a la Z3. El otro grupo ya ha salido y parece que, aprovechando un hueco que les han dejado los otros grupos que hay por la zona, se han metido a la sima de Juan Herranz que es la mas bonita del sitio. La Z3 empieza con un pozo de 21 metros que acaba en una rampa donde hay muchas piedras sueltas. Hay que ir con mucho cuidado pues las piedras caen encima de los que están por debajo. A mi me caen dos en el casco y a otros también les aciertan varias. Es bastante peligroso. Luego nos enteramos que al otro grupo les ha caído una piedra al lado como un bote estanco de grande. Si pilla a alguien lo mata. Y ademas llegan hasta abajo con lo que en ningún momento estamos libres de peligro. Después del primer pozo viene un volado de 31 metros. Cuando se termina hay una pequeña trepada de 3 metros y llegamos al espectacular pozo de 44. Se fracciona a los 7 metros y ya solo nos queda bajar 37 metros totalmente volados hasta el fondo de la cavidad. Luego toca subir. El pozo de 31 apura después del de 44 y la respiración se acelera un poco. Cuando salimos de la cueva el tiempo ha cambiado totalmente. Esta todo cubierto de nubes, con mucho viento y de vez en cuando chispea un poco.


 POZO DE 31 METROS 

POZO DE 44 METROS

POZO DE 44 METROS 

Estamos en el refugio cuando llega Marta diciendo que se ha dejado las llaves del coche en el maletero y ha cerrado con ellas dentro. ¡Desastre! La única solución es alcanzar  con una cuerda la palanca, que hay dentro del coche, con una cuerda. Lo fácil hubiera sido con un alambre pero no tenemos mas que uno chiquitín. Hacemos una especie de columpio que metemos forzando la ventana. Es mas difícil de lo que parece. Muy poco a poco, Oscar le va pillando el tino. Después de muuucho rato consigue pillarla, pero al tirar ¡se suelta el nudo! Menudos espeleologos estamos hechos. Otra vez a probar. Lo vuelve a coger otra vez al cabo de mucho. Tira y el nudo se empieza a deshacer. Contenemos la respiración mientras sigue tirando. Clack. ¡¡Siii!! ¡Ha aguantado! Por fin lo hemos conseguido. Después de mas de una hora el maletero esta abierto. Como ladrones no nos ganaríamos el pan.
La sidra y el orujo de 50 grados de Miguel Ángel corren generosos por nuestros gaznates ( por algunos mas que por otros) Y ya nos echamos a dormir bastante cansados. Hoy hemos conseguido echar a los roncadores a la otra habitación.

 ¡SE RESISTE EL CONDENADO!
¡QUE CARA DE FELICIDAD AL RECUPERAR LA LLAVE!

Al día siguiente nos acercamos a ver si nos dejan entrar a la Juan Herranz pero no hay suerte. Se propone hacer la Bustal 3, un pozo de 60 metros Pero estamos muy vagos y conseguimos convencer a Miguel Ángel para dejarla para otro día e irnos a comer a Molina de Aragon. Se esta ablandando jejeje